1 de marzo de 2011

Mi clara sencillez de alma






El color de un persona no es el mismo bajo el sol cuando una nube pasa, o cuando entra la noche. Pero quien mira, ve bien que son las mismas personas.
Fijate bien en mí: Si miraba hacia la derecha, ahora miro hacia la izquierda, pero soy siempre yo, asentada sobre los mismos pies. La misma de siempre, gracias al cielo y a la tierra, a mis ojos y oídos atentos… Mi clara sencillez de alma.

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